El Argentino, el handball de Córdoba y de más yerbas
Tiempo atrás cuando se comunicaba que Córdoba no estaría en el Argentino, se hablaba también de la posibilidad de ver a los mejores jugadores de la provincia disputando un torneo organizado en casa. Hoy, cerrando el año, no se ha materializado. Los amantes del handball de la provincia y los jugadores de Liga de Honor deberán esperar otros dos años para vestir los colores de «la docta». La ausencia en el torneo de selecciones apenas si hizo ruido en la ciudad. ¿A alguien le preocupó que Córdoba no estuviera o los motivos de la decisión?. El análisis tiene varias aristas. En primer lugar, el calendario. Criticado por todos lados, la superposición con el Nacional A de Clubes fue clave para que la provincia no participara. Como bien se describió en la nota alusiva, el amateurismo extremo de esta disciplina afecta sobremanera a jugadores, técnicos, profesores que deben pedir permisos y afrontar gastos en sus trabajos y familiares en muchos casos para disponer de esos días. En segundo lugar, el dinero. No sólo el costo del viaje de toda la delegación si no que hay clubes de Córdoba que tienen deuda con la Federación. Se sabe que la única fuente de ingreso de la misma es el arancel federativo que abonan los clubes al inscribirse. Por lo tanto la falta de dinero afecta y afectará de modo directo a las selecciones, adultas y de inferiores, qu deban participar de torneos argentinos. La relación directa entre ausencia de dinero y ausencia de viajes de selecciones de inferiores debería ser un motivo suficiente para que cada institución esté incentivada a abonar, ¿no?. Por otra parte, ¿cuál es la sanción de no ir?. O dicho de otro modo, ¿cuál es el beneficio de asistir, salir primero, tercero o quinto? Y acá otro aspecto queda desnudo: la importancia del torneo para la competencia interna. Si competir en un nacional de tres días parece una gota en el océano, disputar un argentino de selecciones cada dos años… parece un grano de arena en pleno desierto. ¿Cuánto contribuye a la mejora de la competencia? Además de reconocimiento ¿qué logra quien sale campeón? Descontando el honor y la gloria, tan importantes para los que jugamos con y por el corazón a estos deportes. ¿Se lleva a caso un beneficio económico, elementos, una cancha, un piso de goma, un techo? Absolutamente Nada. Poco premio para tanto esfuerzo y para una inscripción de – según nos comentan- de $4.000 por equipo. ¿Repercusiones? Pocas. A nivel nacional no hubo sanción que se conozca. ¿Jugará el próximo en la B? A nivel local se condenó desde algunos sectores la ausencia. Es cierto que se espera que una federación con trayectoria se presente. También es cierto que no siempre se puede ir a «cualquier precio». ¿La solución a la ausencia en el Argentino? Un torneo en casa… que no se realizó. La fecha, la falta de infraestructura -tantas veces tratada por nosotros – y la ausencia de dinero; los tres obstáculos infranqueables de toda iniciativa en nuestra ciudad. Un nuevo año estará comenzando en sólo unos días. Será momento de analizar los objetivos planteados y cotejar su cumplimiento. Año nuevo, problemas viejos… y oportunidades por venir. El handball local deberá encontrar el modo de solucionar las flaquezas, y mirara hacia adelante. Criticar sin sumar no sirve. Mirar desde afuera tampoco. Que el 2014 sea un año para recordar para nuestro deporte. Que el apoyo dirigencial desde los clubes y hacia la Federación de Córdoba permita unificar y tirar hacia delante